La Javierada: un regreso lleno de emoción y unión - CPEIP Juan de Palafox Fitero - Ikasnova
La Javierada: un regreso lleno de emoción y unión - CPEIP Juan de Palafox Fitero
La Javierada: un regreso lleno de emoción y unión
16/05/2025
Tras 11 años sin poder participar en la Javierada, este año Fitero ruge con fuerza. Las niñas y niños de 4.º, 5.º y 6.º han caminado hacia Javier y han podido reencontrarse con las raíces que nos unen a este lugar tan especial.
A las 8:30 h, ya estábamos en el autobús, listos para emprender nuestra peregrinación. Dejamos atrás alguna que otra cosa olvidada, pero lo más importante lo llevábamos con nosotros: la ilusión y la sonrisa en nuestros rostros. Allí nos unimos a más de 1000 niñas y niños provenientes de todos los rincones de Navarra, junto con algunos de La Rioja y Zaragoza, creando un ambiente de fraternidad y alegría.
La caminata desde el hotel Yamaguchi hasta la explanada de Javier fue un viaje lleno de descubrimientos: tuvimos la oportunidad de conocer a muchas personas, compartir historias y aprender de otras experiencias. Nos preguntamos unos a otros: ¿Por qué has venido? ¿De dónde eres? Y en el camino, hasta escuchamos relatos de profesoras a punto de jubilarse, que nos regalaron valiosas enseñanzas sobre su trayectoria en la educación.
Ya en Javier, con el cansancio haciendo mella, disfrutamos de un merecido descanso: almorzar, recargar energías y prepararnos para vivir un momento especial: la misa. Presidida por Don Florencio, nuestro arzobispo, nos envolvió con cantos juveniles y un mensaje inspirador que nos invitó a ser generosos y a transmitir amor con cada uno de nuestros gestos. Después de la Eucaristía, compartimos un encuentro personal con el Arzobispo en la Iglesia de Javier, momento en el que le llevamos el cariño y apoyo de todo Fitero, y nos invitó a llevarnos la mano al corazón como tantas veces había hecho allí mismo San Francisco Javier.
Y llegó uno de los momentos más esperados: ¡dos horas de juegos y diversión! Siete enormes hinchables nos hicieron saltar, correr y reír sin parar. Mientras tanto, otros aprovecharon para recorrer el castillo, explorar el entorno o elegir un pequeño recuerdo para llevar a casa.
Sin duda, ha sido un día inolvidable, que esperamos repetir el próximo año. A las 18:10 h llegamos a Fitero con el corazón lleno de historias y la emoción de compartir cada aventura con nuestras familias, que nos recibieron con abrazos y besos.